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El otoño ha llegado y en muchas partes del planeta trae consigo viento y por consecuencia, noches frías.

Hemos aprendido con la experiencia, que tomar un vasito de leche antes de ir a dormir ayuda a tener noches tranquilas y consecuentemente nos mantiene alertas al día siguiente. Estas condiciones son vitales en los niños y precisamente por esta razón, he querido compartir una pequeña receta que ha ayudado a que todos en casa duerman muy bien durante la época de frio.

Leer un cuento infantil, mientras mi niña toma una taza de leche caliente con canela, es una excelente manera para terminar un agitado día y disfrutar una noche placentera.

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¡Dulces sueños!

Aclaratoria: Este artículo hace parte de una campaña patrocinada por California Milk Processor’s Board y Latina Mom Bloggers. Todas las opiniones expresadas son mías.